El prestigioso premio tiene dentro de sus cinco finalistas el proyecto “Gestión y control sostenible de los riesgos de integridad en un entorno complejo: KP-235”, de Ocensa.
El Global Pipeline Award es el mayor premio del mundo centrado en el segmento de oleoductos. Según el acta entregada a los finalistas del premio, “se reconoce el proceso de innovación en tecnología de oleoductos en todas las fases; desde el laboratorio de investigación hasta las aplicaciones de campo; desde las incubadoras de tecnología hasta el desarrollo de mercados para nuevos productos; desde las agencias gubernamentales hasta las empresas privadas; y desde los proyectos individuales hasta la consolidación de los resultados de investigación y desarrollo”.
El proyecto presentado por Ocensa, que hace parte de los cinco finalistas del premio, se denomina: “Gestión y control sostenible de los riesgos de integridad en un entorno complejo: KP-235”. Y hace referencia a un estudio de caso de cómo la empresa opera en una de las regiones geológica, ambiental y socialmente más complejas de la Tierra.
El ganador del Global Pipeline Award se conocerá en el próximo 24 de septiembre durante la International Pipeline Conference a realizarse en Calgary, Canadá.
El eje del proyecto es el sistema de alerta temprana de deslizamientos de tierra activado por lluvias, una herramienta de análisis predictivo de interacciones agua-suelo que, a partir de variables meteorológicas, topográficas, geológicas, geomorfológicas y de actividad antrópica, aplica técnicas de aprendizaje automático para generar un mapa predictivo diario de amenazas a lo largo del oleoducto.
Este modelo ha sido construido de manera colaborativa por investigadores de la Universidad Nacional de Colombia e ingenieros de Ocensa, y ha sido descrito en detalle en dos artículos aceptados por el IPC.
El proyecto se centra en el manejo de esta herramienta durante el mantenimiento realizado con la intervención en el kilómetro 235 del oleoducto, en el cual se destaca cómo la empresa ha consolidado prácticas de gestión con estándares internacionales, en el complejo entorno del norte de Sudamérica. Donde tiene que afrontar complejidades físicas, ambientales, jurídicas y socioeconómica, cultural e institucionales.
En este contexto, la gestión en el PK-235 demuestra la implementación de prácticas de conocimiento y reducción de riesgos físicos con estándares internacionales, combinadas con una estrategia de respuesta a emergencias e incidentes de carácter social.